Desearía besar tus labios una vez más, aunque sean de sabor amargo.
Olvidé lo que era el amor y decidí caminar por la senda de lo oscuro y truculento.
Las tinieblas se hicieron mi cama, mi refugio, y los sueños fueron muriendo.
Dejé que todo lo que amaba se perdiera, se diluyera en medio de la lluvia ácida de mis lágrimas.
Y los sueños no volvieron, sólo las pesadillas como terribles murciélagos revoloteando sobre mi cabeza.
Yo no hice nada, tan sólo me dejé morir un poco. Tal vez sí hice algo.
Ahora me dejo convencer por tu cariño, por el recuerdo de este.
Y el recuerdo es tan dulce y embriagador, tanto como el aroma de las amapolas.
Eres delicado, de rostro perfecto, un muñeco y yo no supe cuidarte.
Te dejé, te dejé cruelmente y te dije que otro te cuidaría mejor.
Las mentiras se me dieron mal siempre, supiste que nadie vendría y que únicamente quería cuidarte yo.
En estos momentos estoy ante ti con la mirada perdida, ebrio y tembloroso.
Sólo quería decirte que te amo, que no puedo dejar de amarte.
El veneno que me has dado es superior a cualquier maleficio.
Por favor, acéptame de nuevo entre tus brazos... he vuelto para quedarme.
Olvidé lo que era el amor y decidí caminar por la senda de lo oscuro y truculento.
Las tinieblas se hicieron mi cama, mi refugio, y los sueños fueron muriendo.
Dejé que todo lo que amaba se perdiera, se diluyera en medio de la lluvia ácida de mis lágrimas.
Y los sueños no volvieron, sólo las pesadillas como terribles murciélagos revoloteando sobre mi cabeza.
Yo no hice nada, tan sólo me dejé morir un poco. Tal vez sí hice algo.
Ahora me dejo convencer por tu cariño, por el recuerdo de este.
Y el recuerdo es tan dulce y embriagador, tanto como el aroma de las amapolas.
Eres delicado, de rostro perfecto, un muñeco y yo no supe cuidarte.
Te dejé, te dejé cruelmente y te dije que otro te cuidaría mejor.
Las mentiras se me dieron mal siempre, supiste que nadie vendría y que únicamente quería cuidarte yo.
En estos momentos estoy ante ti con la mirada perdida, ebrio y tembloroso.
Sólo quería decirte que te amo, que no puedo dejar de amarte.
El veneno que me has dado es superior a cualquier maleficio.
Por favor, acéptame de nuevo entre tus brazos... he vuelto para quedarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario