Tú, mi musa

Búscame más allá de los sueños,
más allá de lo indómito de tu jardín.
Me hallarás aferrado a tu cintura
esperando que me mires como aquel día.

Bailaré a tu lado, bajo aquella lluvia
bañando tu piel de claro de luna
y sintiendo al fin que todo comienza.
Besaré tus labios mientras no amanece.

Ponte ese traje que tanto me gustó,
ese oriental con flores de pasión y tallos de bambú.
Pinta tus labios con la sabia de un viejo sáuce
y sacude de tus cabellos las mariposas negras.

Te alzarás única e indomable, indómita.
Te mostrarás al fin como eres, no como creen.
Y yo me enamoraré de ti como si fueras la primera,
el primer amor que enciende la mecha.

Tú eres la pasión en molde de mujer,
silueta inquieta que danza como serpiente
y se contonea como gato en la noche.
Tú eres la poesía dispersa en campos de azafrán.

Búscame más allá de tus tierras,
donde anidan las golondrinas de invierno.
Me hallarás componiendo palabras
que inventaré para calificar nuestro encuentro.